En mi ranquing de tartas de queso, ésta ocupa de momento la primera posición. La receta es la del restaurante La Viña en San Sebastián. No la he probado in situ, pero tengo esa cita pendiente para ver si la receta original es mejor aún.
1 Kg. Queso Philadelphia
400 grs. azúcar
7 huevos
1/2 L. nata líquida
30 grs. harina
La primera vez que la hice, para probarla, hice en un molde más pequeño y con la mitad de los ingredientes.
He visto un reportaje de televisión en el que aparece el cocinero de La Viña explicando cómo hace la tarta. Él forra el molde desmontable con papel vegetal mojado en agua y arrugado.
Precalentamos el horno a 210º.
Mezclamos bien los ingredientes.
Cuidado porque si le metemos mucha batidora corremos el riesgo de que se raje la superficie. Esto me ha pasado a mí por hacerla rápido y batirla demasiado, la masa coge mucho aire y cuando se cocina en el horno se abre. Aunque en el sabor no afecta, sí queda menos bonita y como esta tarta no va cubierta de mermelada no se puede disimular...
Según la receta original, son 40 min. de horno. La tarta después de ese tiempo baila, parece como si estuviera sin cuajar, pero ha de quedar así, porque la tarta por dentro tiene que quedar cremosa. Luego debe reposar durante unas horas o incluso se puede hacer de víspera. Yo la dejé toda la noche dentro del horno ya apagado.
Si le cogéis el punto al horno, es una tarta sencilla de hacer. Animaros a probarla, es muy rica.
