La tarta es de bizcocho y chocolate. Hice un bizcocho rectangular y lo abrí en capas.
Empapé las capas de almíbar para que la tarta quedé muy jugosa.
Se rellena de ganache de chocolate y se cubre.
Una vez fría la cobertura, se tapa con el fondant blanco.
Y pasamos a decorar con las letras, las flores, perlitas de azúcar...
Esta vez lo único que no es comestible es la muñequita que corona la tarta.
Les gustó mucho la tarta. Gracias Saioa por confiar en mí para este día tan especial.